«Bio-ética» = «ética de la vida»

La confirmación precisa y firme del valor de la vida humana y de su carácter inviolable, irreductible, que por su valor intrínseco, reclama ser tratada con amor de benevolencia.
La responsabilidad de la promoción y defensa del derecho a la vida, un compromiso existencial y práctico a favor de todas las personas, en especial, de los más débiles
Argumentar auténticamente la existencia y la condición espiritual del alma humana en diálogo real con las ciencias biomédicas contemporáneas.
Es una ciencia moral, no técnica, que ofrece criterios éticos a las ciencias experimentales sobre la vida.

domingo, 1 de noviembre de 2009

Principios de la Bioetica Personalista

Extraìdo de un artículo de Marila García Puelpan


La condición de persona es el fundamento ontológico-real que sustenta y da validez a los principios teóricos de la bioética personalista. Son 4 principios que operan como ayuda y guías de la acción y que deben ser tomados en consideración en cada decisión relativa a la relación con el paciente y en la investigación con seres humanos

1) Principio de respeto a la vida humana.

El valor fundamental de la vida ordena la indisponibilidad y la sacralidad de la vida. El derecho a la vida es el primero de los derechos y el más fundamental, porque sin él todos los demás –incluida la libertad- son inexistentes. El respeto a la vida, así como su defensa y promoción, tanto la ajena como la propia, representan el imperativo ético más importante del ser humano, es un valor absoluto que hay que respetar siempre, es lo más sagrado que tenemos, la vida de cada cual es única, irrepetible, insustituible, inviolable. Tal respeto a la vida humana se entiende en todas sus etapas de manifestación, desde el momento de la concepción (fecundación) hasta el último instante (muerte cerebral total).

La relación que el ser humano establece sobre el mundo material-visible no es de la misma naturaleza que puede ejercer sobre la vida humana. Sobre el mundo se llama dominio técnico y respecto del cuerpo humano y la vida humana la relación que se establece es de carácter ético, en tal caso la actitud ética correcta no es la del uso o la eficacia sino la del respeto. Por lo tanto, con la persona humana no es lícito establecer una relación de dominio o de producción. Respetar el cuerpo y la vida humana significa que nunca puede ser utilizada como medio para un fin distinto a ella misma, no puede ser cosificada, no puede ser objeto de experimentación si no es bajo ciertas condiciones y nunca de manera arbitraria. Para quien piensa que todo es negociable, lo es hasta el derecho más fundamental que es el derecho a la vida. Al respecto Kant habla de precio para las cosas y dignidad para las personas.

"En el lugar de lo que tiene un precio puede ponerse alguna otra cosa equivalente; lo que, por el contrario, se eleva sobre todo precio y, por lo tanto no permite ningún equivalente, tiene dignidad"Kant

2) Principio de libertad y responsabilidad

Este principio señala que el paciente ha de ser libre al decidir sobre la opción terapéutica que se le va a aplicar, decisión que debe tomar en base a un conocimiento racional de los hechos y desde su propia libertad. Esta libertad debe venir acompañada de responsabilidad, la cual le impide obrar contra sí mismo, mediante el suicidio o la eutanasia. Y respecto del médico el principio le alcanza en el sentido de que el límite de su libertad es el respeto a la dignidad de la persona. Es decir Libertad-Responsabilidad del médico frente al paciente en cuanto éste y su verdadero bien es el centro, medida y fin de la acción médica, pero también libertad-responsabilidad del paciente frente a sí mismo y frente al médico, en el sentido de que le corresponde colaborar con sus propios cuidados y salvaguardar su propia vida. Ni la conciencia del paciente debe violentarse por el médico ni la del médico por el paciente

3) Principio de totalidad o principio terapéutico

Prescribe la obligatoriedad de que el acto médico –o todo acto que intervenga sobre la vida humana- considere al paciente en su totalidad.
El principio se refiere a la justificación de la pérdida directamente querida de un miembro u órgano como medio para salvar el organismo. En virtud de este principio se concede al todo-persona disponibilidad sobre las partes para asegurar la existencia y para evitar un daño que no podría ser evitado de otro modo. La parte existe para el todo y por lo tanto puede ser sacrificada para beneficio del todo. Este principio avala la cirugía exigiendo: a). que la operación esté orientada al bien del organismo sobre el que se incide, b). es preciso que se intervenga sobre la parte enferma, c). que no exista otro modo razonable de curar la enfermedad y que se haga en el momento de la necesidad, d). que se de una alta probabilidad de mejoría, e). que haya consentimiento por parte del paciente. Se aplica no sólo a casos generales de intervención quirúrgica, sino también a casos específicos como terapia genética, experimentación sobre embriones humanos, esterilización, trasplantes de órganos, etc.


4) Principio de sociabilidad y subsidiaridad


Este principio implica la condición de la persona como ser social, como "ser con" otros. Esto quiere decir que como personas, todos estamos involucrados en la vida y en la salud de los demás, en la ayuda al otro. El principio obliga a la comunidad a promover la vida y salud de todos y cada uno, a ayudar donde la necesidad sea mayor y promover el bien común, respetando siempre los derechos de la persona. Surge así una obligación social de garantizar la salud de los ciudadanos y de ocuparse de la destinación y distribución de los recursos sanitarios

Subsidiaridad es atender las necesidades de los demás sin sustituirles en su capacidad de decidir y actuar, implica que las instancias superiores de la sociedad –gobiernos, instituciones- organizaciones internacionales- no deben suplantar, sino ayudar, a las instancias inferiores: individuos, familias, asociaciones, etc. A nivel de relación con el paciente la subsidiaridad comienza por el respeto a la autonomía del paciente, es decir, atender a sus necesidades sin sustituirle su capacidad de decidir y actuar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario